Del papel a la pantalla: el fenómeno Bridgerton enamora a lectores y espectadores por igual
La estética y el glamour británicos del Período Regencia se instauran en Netflix y en el corazón de millones de espectadores de la mano de la tercera temporada de Los Bridgerton. La saga de novelas de la escritora norteamericana Julia Quinn triunfa en librerías y en la popular plataforma de series gracias a su variado elenco, sofisticada ambientación y sus constantes enredos amorosos.
Los Bridgerton no son una familia más, ni tan siquiera entre la alta sociedad inglesa de su tiempo, allá a inicios del siglo XIX. Bajo la batuta de la vizcondesa Violet, viuda del vizconde Edmund Bridgerton, sus ocho hijos sobreviven a los enredos y entresijos de la alta sociedad entre anhelos de amor, aventura y la búsqueda de una felicidad distinta en cada caso, mientras su madre trata de concertar matrimonios beneficiosos para cada uno de ellos: Anthony, Benedict, Colin, Daphne, Eloise, Francesca, Gregory y Hyacinth son cada uno el corazón de una de las novelas de la saga.
Este conjunto de ocho novelas, muchas de las cuales han ocupado puestos elevados en la célebre lista de los libros más vendidos del New York Times, nació de la imaginación e inquietudes de Julia Quinn, inspirada desde pequeña por sus primeras lecturas: Sweet Valley High, la serie de libros que la animó, en contra de los deseos de su padre, a iniciar su andadura como escritora. Licenciada en Historia del Arte, abandonó sus posteriores estudios en la Escuela de Medicina para volcarse completamente en sus novelas, de temática eminentemente romántica y perspectiva feminista.
Siguiendo una fórmula que se ha revelado recurrentemente como exitosa a la vez que lucrativa, Netflix decidió contactar con Quinn para planear la adaptación de sus novelas a la pequeña pantalla, una jugada que le ha traído a la plataforma algunos de sus mayores éxitos entre los que destacan Alias Grace, Un lugar para soñar, Orange is the new black, The Witcher o Por trece razones, entre muchas otras. Tras el sonado estreno de la tercera temporada de Los Bridgerton, se puede considerar que la decisión fue un absoluto éxito, y su fandom ya espera con impaciencia nuevos capítulos.
Junto a su abrumador éxito, la serie ha traído infinitos debates en las redes sociales debido a los cambios más o menos sutiles entre la obra literaria y la cinematográfica: el orden de sus entregas (pasando del segundo al cuarto libro en la serie y, por tanto, retrasando la historia de Benedict en favor de la de Colin), el aspecto físico de uno de sus personajes más importantes, cambios relevantes en cuestiones de actualidad como las relaciones consensuadas o la diversidad étnica… Y, por supuesto, la narradora en off de la misteriosa Lady Whistledown, con la voz insuperable de Julie Andrews para deleite de los oídos del público.